El canciller turco, Hakan Fidan (centro), habla con la prensa en paso fronterizo de Rafah, 4 de agosto de 2024. El ministro de Asuntos Exteriores de Turquía, Hakan Fidana, denuncia que las prácticas de Israel de bloquear la ayuda es la “primera fase del genocidio”.
“El cierre de la frontera por parte de Israel, los ataques a los convoyes de ayuda, el asesinato de trabajadores humanitarios, el bloqueo de la evacuación de enfermos y civiles y la descomposición de miles de camiones llenos de material de ayuda son crímenes contra la humanidad y constituyen la primera fase del genocidio que se está llevando a cabo al otro lado de la frontera”, subrayó el canciller turco después de visitar el puerto egipcio de Al-Arish y el cruce fronterizo de Rafah, que une Palestina y Egipto.
El máximo diplomático turco instó además a la comunidad internacional a no permanecer en silencio ante “la opresión de Israel”.
Advirtió al mundo occidental, especialmente a Estados Unidos, que todos serán cómplices del genocidio en curso si no se lo detiene.
“Si no detenemos juntos esta masacre, la humanidad será cómplice de ella, por eso, debemos esforzarnos por brindar toda la ayuda posible y aumentar toda la presión sobre Israel”, puso de relieve Fidan.
El cruce de Rafah es un punto de entrada clave para la asistencia humanitaria a la bloqueada Franja de Gaza.
Al capturar el cruce de Rafah, Israel obtuvo antes el control total sobre la entrada y salida de personas y mercancías.
Israel ha cerrado repetidamente el cruce estrictamente controlado en un intento deliberado de bloquear el flujo de alimentos, medicinas y suministros básicos a Gaza, utilizando el hambre de los civiles como método de guerra.
El régimen sionista también ha destruido las salas de pasajeros del cruce de Rafah como parte de sus crímenes contra los palestinos en la Franja de Gaza.
Israel comenzó una brutal guerra genocida respaldada por Estados Unidos contra la sitiada Franja de Gaza el 7 de octubre. Sin embargo, casi diez meses después de la ofensiva, y pese a haber asesinado o herido a más de 130 000 civiles palestinos, el régimen de Tel Aviv no ha logrado sus objetivos jurados de esta ofensiva letal, principalmente, la eliminación del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS).
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