Palestinos de la Franja de Gaza ingresados en un centro de detención en la base militar israelí de Sde Teiman, en el sur de la Palestina ocupada.
La tortura contra los palestinos en las prisiones del régimen israelí ha alcanzado niveles sin precedentes, tras la guerra en Gaza, revela un oficial israelí.
El portal estadounidense The Grayzone publicó el viernes un informe, basado en declaraciones de un experiodista israelí ahora oficial de inteligencia, Amichai Attali, que revela un perturbador testimonio sobre el trato que reciben los palestinos en las cárceles israelíes.
Attali, corresponsal en el parlamento israelí del medio hebreo Ynet y oficial de inteligencia de reserva en el ejército de ocupación israelí, asegura que las fuerzas sionistas torturan física y psicológica a los prisioneros palestinos.
Attali, quien pasó 227 días en el complejo militar de Hakirya, donde interrogó a palestinos, afirma que se enfrentó a tan mala experiencia en ese recinto que, resalta, aun no ha logrado asimilar por completo.
Detalla que su contacto con los palestinos detenidos se limitaba a interrogatorios que no arrojaban resultados y que se sentía impotente ante las atrocidades cometidas en Hakirya, donde los soldados utilizaban música israelí para provocar crisis psicológicas en los prisioneros.
Menciona que presenció en el complejo militar de Hakirya cómo “masas” de palestinos esposados eran sometidos a una incesante música israelí. El periodista describió la tortura sónica sufrida por los palestinos encarcelados como una experiencia similar a estar en una “casa de los horrores”, con gritos provenientes de todas partes durante el interrogatorio.
Al respecto, hace referencia a una polémica canción infantil hebrea que se hizo popular en las redes sociales israelíes, luego de que soldados fueran grabados sometiendo a palestinos con los ojos vendados a una cruel repetición de la misma.
Pese a que se le conoce como una “investigación estéril”, el propósito principal sigue siendo obtener información de inteligencia.
Desde octubre de 2023, el régimen israelí ha realizado secuestros de palestinos en Gaza y la Cisjordania ocupada, en medio de su brutal agresión contra el enclave costero, donde la cifra de muertos por los bombardeos israelíes superan 43 603.
Desde entonces, más de 11 600 palestinos han sido secuestrados y detenidos en los territorios ocupados y en Al-Quds, según la Comisión de Asuntos de Detenidos y ExDetenidos y la Sociedad de Prisioneros Palestinos.
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