Yahya Al-Sinwar fue mártir entre su pueblo vistiendo su uniforme militar favorito, portando su rifle y enfrentándose a las fuerzas de ocupación en Rafah.
El combatiente hasta el último aliento Yahya Al-Sinwar
Salió de las prisiones israelíes después de unos 23 años allí, hacia la Franja de Gaza, leal a la gente libre, como todos los líderes que lo precedieron. Fue mártir entre su pueblo vistiendo su uniforme militar favorito, portando su rifle y enfrentándose a las fuerzas de ocupación en Rafah.
Se trata del mártir Yahya Ibrahim Sinwar, un palestino nacido en 1962, en el campamento de Khan Yunis, refugiado de la Ashkelon ocupada. Se trata de Abu Ibrahim, que fue mártir como jefe del Consejo Político del movimiento Hamas, sucediendo al también mártir Abu Al-Abd, Ismail Haniyeh.
El hombre que representaba un nodo para "Israel" en sus servicios de seguridad e inteligencia era un especialista en lengua árabe y contribuyó a la creación de la Facultad de Artes de la Universidad Islámica de la Franja de Gaza.
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"La imagen de Sinwar luchando y portando armas confirma la grandeza de este pueblo y de que no puede ser derrotado", expresó, Maher Al-Taher, responsable de Relaciones Internacionales del Frente Popular para la Liberación de Palestina.
Además del idioma árabe en el que escribió su novela “Cardos y clavos” desde el interior de la prisión, Sinwar aprendió hebreo durante su cautiverio, que duró unos 23 años. Lo dominaba y lo dominaba, y conocía bien a su enemigo, hasta que su liberación se convirtió en el mayor error de este enemigo.
“Israel” sabe muy bien que su guerra no conducirá a la victoria a la que aspira, que es “eliminar a Hamas”, cuyas brigadas pronto aparecerán, a través de los proyectiles de “Yassin 105” en Jabalia, y el dron “Al-Zawari” en Khan Yunis , y el dron “Al-Maqadmeh” en el cielo de "Tel Aviv", con cada vez que el ejército de ocupación decía que se había librado de ellos.
Así como los mártires Sheikh Ahmed Yassin, el ingeniero Mahmoud Al-Zorai y el médico Ibrahim Al-Maqadmeh siguen presentes sobre el terreno, como todos los mártires, Abu Ibrahim, el hombre de una mente excepcional que trabajó en árabe y hebreo, permanece en la plaza con los combatientes, persiguiendo con ellos a los soldados de ocupación en los callejones de Gaza, y colocando trampas explosivas en los edificios que invadieron y en los túneles que pensaban que no se los tragarían.
Yahya Al-Sinwar es el fundador de Majd, el servicio de seguridad de Hamas. Él es quien estableció el aparato que garantiza la continuación del movimiento de resistencia islámica en Palestina, que el mundo entero, especialmente Estados Unidos, reconoció como imposible de eliminar. ¿Borrará “Israel” su huella después de haber sido incapaz de impedirle asumir misiones de seguridad que contribuyeron a garantizar la supervivencia de Hamas, desde sus prisiones fortificadas, cuando estaba bajo sus ojos y dentro de sus muros?
Después de ser liberado del cautiverio en el acuerdo “Lealtad de los Libres” en 2011, en cuya gestión también participó desde el interior de las prisiones israelíes, Sinwar se casó y tuvo tres hijos. Coordinó entre los líderes políticos y militares de Hamas durante la Batalla de 2014. Se convirtió en el jefe de Hamas en Gaza en 2017. En 2021, tomó la decisión de lanzar la Batalla “Saif al-Quds Espada de Jerusalén”, la batalla en la que Sinwar retó a “Israel” a asesinarlo y en la que predicó a su pueblo que “golpear a "Tel Aviv" es más fácil para nosotros que un trago de agua”.
En 2023, lanzó la batalla “Diluvio de Al-Aqsa”, anunciada por el Comandante en Jefe de las Brigadas Al-Qassam, Abu Khaled Muhammad Al-Deif, en la mañana de ese sábado 7 de octubre. Sinwar sacudió el suelo bajo "Israel". La resistencia cruzó a los territorios ocupados, y desde esos momentos dirigió a los palestinos y al eje de resistencia, con el que Sinwar fortaleció la relación, hacia la liberación de Palestina, de toda Palestina y, de hecho, de toda la región, de “Israel” y los Estados Unidos.
El desafío de Sinwar a "Israel" para asesinarlo fue precedido por varios intentos de hacerlo. La ocupación bombardeó su casa durante su agresión contra Gaza en 2012. Luego, en 2021, el año de la "Espada de Jerusalén", la ocupación bombardeó más de un lugar tratando de alcanzarlo.
"Israel no lo asesinó"; no asesinó a su pesadilla y al arquitecto del ataque más peligroso contra la entidad, como quería e intentó durante años. Más bien, el líder palestino fue mártir en un enfrentamiento, portando su arma.
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