La agresión israelí contra la Franja de Gaza ha entrado en su 61º día consecutivo. Hoy, las fuerzas de ocupación intensificaron sus incursiones, bombardeos y ataques brutales contra civiles palestinos inocentes. En medio de esta tragedia inimaginable, la resistencia palestina continúa mostrando una resiliencia heroica y luchando contra las fuerzas de ocupación.
Según el Centro de Información Palestino, los aviones, la artillería y los barcos de la ocupación han llevado a cabo innumerables incursiones y bombardeos en toda la Franja de Gaza, lo que ha provocado cientos de mártires y heridos. Las regiones del sur, en particular Jan Yunis, han sido fuertemente atacadas por violentos bombardeos e incursiones terrestres, desatando caos y devastación en la zona.
Los informes indican que la Escuela Palestina para Desplazados en Yabalia fue bombardeada por fuerzas israelíes, causando un número importante de víctimas. Entre las víctimas inocentes se incluye un niño mártir de la familia Baraka, que fue víctima de disparos de las fuerzas de ocupación cerca de la Escuela para Desplazados.
Además, helicópteros israelíes han disparado hacia zonas orientales de Jan Yunis, mientras lanzaban bombas de humo contra una escuela para desplazados. Las fuerzas de ocupación también han participado en operaciones masivas de arrasamiento y destrucción en ciudades como Bani Suhaila, Abasan y Al-Qarara.
La situación ha empeorado hasta el punto de que muchas familias en diferentes barrios de Bani Suhaila están ahora sitiadas, y se han hecho llamamientos a la Cruz Roja para que coordine su salida segura debido al deterioro de las condiciones humanitarias y al miedo a bombardeos indiscriminados.
El implacable ataque de las fuerzas de ocupación continúa sin tregua. Los incesantes ataques aéreos han tenido como objetivo viviendas de civiles, incluida una casa en el “Bloque 2” del campamento de Yabalia, matando a personas inocentes, incluidos niños.
En una nueva y cruel incursión, la casa de la familia Abu Mustafa en el campamento occidental de Jan Yunis fue bombardeada, lo que provocó la muerte de tres personas, entre ellas una niña. Fuentes médicas confirmaron las trágicas muertes de Ramez Al-Nayyar, director de la Clínica Gubernamental de Juzaa, y de su hijo Zaid, durante el asalto del ejército de ocupación a la zona de Rumaidah en Bani Suhaila.
Los aviones y la artillería de ocupación no han mostrado piedad, bombardeando varias zonas como los barrios de Al-Tuffah, Al-Daraj y Al-Shuya’iya en la ciudad de Gaza. Juza’a, Abasan, Al-Fujari y el campamento de Nuseirat también han sido objeto de intensos bombardeos de artillería y ataques aéreos, que han causado más heridos y devastación.
El uso de bombas de fósforo por parte de las fuerzas de ocupación en el campo de refugiados de Yabalia se ha sumado al horror experimentado por los civiles inocentes. Las zonas occidentales de Jan Yunis fueron bombardeadas por aviones de ocupación hasta altas horas de la noche, cobrándose más vidas inocentes y provocando mayor destrucción.
En un acontecimiento horripilante, siete ciudadanos perdieron la vida cuando la ocupación tuvo como objetivo una casa perteneciente a la familia Yunis en el campo de Nuseirat. La magnitud de la devastación y el número de víctimas siguen aumentando: cientos de mártires siguen enterrados bajo los escombros y sus cuerpos aún no han sido recuperados por los abrumados equipos de defensa civil.
La oficina de prensa del gobierno reveló que desde el rechazo de la tregua humanitaria, el ejército de ocupación israelí ha cometido 77 masacres, que resultaron en la muerte de 1.248 mártires que llegaron a los hospitales. Esto eleva el número total de mártires que han llegado a los hospitales a la asombrosa cifra de 16.248, en 1.550 masacres desde el inicio de esta brutal guerra. Entre las víctimas se encuentran 7.112 niños y 4.885 mujeres.
Los equipos médicos también han sufrido inmensas pérdidas: 286 mártires, incluidos 32 miembros del equipo de defensa civil, y 81 periodistas perdieron la vida. El número de personas desaparecidas ha llegado a 7.600, sepultadas bajo los escombros o se desconoce su suerte.
La Franja de Gaza también se enfrenta a un elevado número de infecciones: se ha informado que 43.616 personas están infectadas.
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