Por Humaira Ahad
La alegría y el júbilo flotaban en el aire mientras una corriente de invitados entraba a la casa de Al-Shaima Akram Saidam para felicitarla por una hazaña encomiable de superar los exámenes escolares.
Al-Shaima del norte de Gaza, obtuvo una puntuación de 99,6 por ciento en el examen anual de escuela secundaria de este año anunciado en julio, obteniendo la primera posición en toda la franja costera sitiada.
En entrevistas con los medios de comunicación locales, que hacían cola fuera de su casa en el norte de Gaza, la colegiala palestina habló exuberantemente de sus grandes sueños, esperanzas y ambiciones.
Al-Shaima también comentó sobre los arduos esfuerzos y el trabajo duro para enfrentar los exámenes altamente competitivos, que finalmente arrojaron resultados, ya que obtuvo el primer lugar en la Franja de Gaza.
Es pertinente mencionar que más del 40 por ciento de los 2,2 millones de habitantes de Gaza está compuesto por niños.
“Conseguir este logro no fue fácil, fue muy difícil”, afirmó en una de sus entrevistas. “Yo solía decir: ‘Espero aprobar’, pero [alcancé] este promedio, gracias a Dios”, manifestó.
Una palestina orgullosa, la adolescente llevaba una kufiya palestina alrededor de su cuello mientras los periodistas locales hacían clic en fotos y grababan vídeos para publicarlos con las entrevistas.
“Cuando vi mi grado, realmente me sorprendí y me sentí muy feliz. El trabajo duro ha dado sus frutos”, dijo ella emocionada.
Su padre, en una entrevista con un medio de comunicación local palestino después de que se anunciaran los resultados en julio, aplaudió que las difíciles condiciones de vida no afectaron el desempeño ni debilitaron el espíritu de Al-Shaima.
“El tema de la electricidad no es nuevo para nosotros, siempre ha sido así”, afirmó en su momento. “Existen alternativas como las baterías; hoy hay alternativas, gracias a Dios”.
Al-Shaima Akram Saidam con sus padres en tiempos más felices. (Foto: Twitter)Al-Shaima ya había hecho planes para el futuro. Ella quería ser traductora. Quería ingresar en la Universidad Islámica de Gaza y matricularse en una licenciatura en traducción inglés-árabe.
La universidad fue volada en un ataque aéreo israelí días después de que comenzara el bombardeo el 7 de octubre.
El 15 de octubre, en medio de los bombardeos indiscriminados del régimen israelí en Gaza,Al-Shaima y muchos otros miembros de su familia también murieron. Ella fue silenciada y sus sueños destrozados.
Según Quds TV, con sede en Gaza, murieron en ataques aéreos israelíes contra el campo de refugiados de Al Nuseirat, cinco kilómetros al noreste de la ciudad de Deir al-Balah, en el centro de Gaza.
El campo de refugiados alberga a miles de palestinos desplazados, incluidos los desplazados desde el 7 de octubre, cuando el régimen israelí lanzó el bombardeo aéreo indiscriminado en el norte de Gaza.
Las secuelas del bombardeo mostraron edificios derrumbados y cadáveres tirados por todo el campo.
Este era el lugar donde la adolescente y su madre embarazada habían buscado refugio después de que el régimen sionista lanzara ataques contra la población civil en Gaza tras la operación Tormenta de Al-Aqsa.
Al-Shaima y su familia no se dieron cuenta de que el campo de refugiados también sería un objetivo.
Al ataque al campo de refugiados de Al Nuseirat le siguieron ataques consecutivos al campo de refugiados de Jabalia, el mayor campo de refugiados en el norte de la Franja de Gaza.
El número de muertos en la Franja de Gaza ya ha superado los 16 000, la mayoría de ellos niños y mujeres.
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