Un bebé palestino de tres semanas que murió de hipotermia es visto en la morgue del Hospital Nasser en Khan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, el 25 de diciembre de 2024. (AFP)
UNRWA advierte que más bebés están perdiendo la vida debido a la severa caída de la temperatura y la falta de refugio en Gaza.
La semana pasada, al menos cuatro bebés murieron de hipotermia debido a las bajas temperaturas y la falta de calor mientras vivían en tiendas de campaña en la Franja sitiada.
El viernes, el jefe de la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados palestinos, Philippe Lazzarini, dijo en un mensaje en X que los bebés de Gaza “están muriendo de frío debido al frío y a la falta de refugio”.
“Mantas, colchones y otros suministros invernales han quedado estancados en la región durante meses a la espera de la aprobación para ingresar a Gaza”.
Lazzarini volvió a pedir un alto el fuego inmediato e instó a “un flujo inmediato de suministros básicos muy necesarios, incluso para el invierno”.
Tales llamados aparentemente no sirven de nada dentro de la comunidad internacional dada la incesante campaña de genocidio de Israel en Gaza desde octubre de 2023.
Las autoridades sanitarias de Gaza dijeron el 26 de diciembre que un bebé recién nacido murió de frío en un campamento de tiendas de campaña en el campo de refugiados de al-Mawasi, en el sur de Gaza.
Según Ahmed al-Farra, jefe de pediatría y obstetricia del Hospital Nasser de Khan Younis, el personal de la UCI neonatal ve al menos cinco casos de hipotermia por día.
45.300 y el número sigue aumentando. Esa es la cantidad de palestinos que Israel ha masacrado en Gaza desde el 7 de octubre de 2023. El régimen sigue envalentonado por el apoyo sólido que recibe de Washington.
De esa cifra, más de 17.600 son niños, según las autoridades sanitarias de Gaza. Unos 17.000 niños se han quedado solos o separados de sus padres y cuidadores.
La UNICEF ha afirmado que en Gaza los bebés están siendo “entregados al infierno”.
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