El director del hospital Al-Shifa, Mohammed Abu Salmiya (2.° a la derecha), espera hacer una declaración en Khan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, el 1 de julio de 2024. (Foto de AFP)
El director del hospital Al Shifa de Gaza, que estuvo detenido por las fuerzas israelíes durante más de siete meses, dice que fue sometido a "severas torturas" durante su detención en cárceles israelíes.
Mohammed Abu Salmiya estaba entre los más de 50 palestinos liberados y regresados a Gaza, según una fuente médica en el territorio asediado.
Salmiya dijo en una conferencia de prensa el lunes que los detenidos “son sometidos a todo tipo de tortura” en las cárceles y centros de detención de Israel.
“Había torturas casi a diario. Las celdas eran asaltadas y los presos eran golpeados”.
"Varios reclusos murieron en los centros de interrogatorio y fueron privados de alimentos y medicinas", dijo el jefe del hospital.
Salmiya dijo que los guardias de la prisión del régimen “le rompieron un dedo y le hicieron sangrar la cabeza durante las palizas, en las que utilizaron porras y perros”.
Según él, el personal médico del régimen israelí en diferentes centros de detención también participó "violando todas las leyes".
A algunos detenidos palestinos, dijo, les habían amputado miembros debido a la mala atención médica.
Salmiya dijo que todavía hay miles de detenidos por las fuerzas del régimen.
El movimiento de resistencia palestino Hamás dijo en un comunicado que las condiciones de los prisioneros recién liberados -que muestran signos de emaciación y tortura física y psicológica- exponen la naturaleza criminal del régimen fascista israelí.
Refiriéndose al testimonio del Dr. Salmiya, Hamas dijo que los palestinos están sujetos a todo tipo de abusos y torturas dentro de las cárceles israelíes por órdenes directas de las autoridades israelíes como parte de su política fascista de "exterminar al pueblo palestino" con el pleno apoyo del gobierno de Estados Unidos.
Además, instó a la comunidad internacional, a las Naciones Unidas y a las instituciones de la ONU a “trabajar inmediatamente para detener esta masacre llevada a cabo por el gobierno de ocupación nazi”, subrayando la necesidad de “proteger a los prisioneros y a los civiles en las zonas de conflicto”.
Según la oficina de medios de Gaza, las fuerzas del régimen han secuestrado al menos a 5.000 palestinos desde octubre de 2023, cuando el ejército lanzó su guerra más sangrienta en el territorio asediado.
Aún se desconoce el destino de muchos de ellos y las condiciones de su detención, indicó la oficina de prensa.
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La Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre la Tortura, Alice Jill Edwards, dijo anteriormente que había recibido informes de que los palestinos estaban siendo golpeados, mantenidos en celdas con los ojos vendados y esposados durante períodos excesivos, privados del sueño y amenazados con violencia física y sexual.
Otros informes sugieren que los detenidos han sido insultados y expuestos a actos de humillación, como ser fotografiados y filmados en poses degradantes.
El experto de la ONU instó al régimen a permitir el acceso inmediato de observadores internacionales de derechos humanos y humanitarios a todos los lugares donde los palestinos han estado detenidos desde octubre.
Los grupos de derechos humanos han alertado en repetidas ocasiones sobre las “condiciones difíciles sin precedentes” en las que se encuentran todos los detenidos palestinos, incluidas las mujeres. En la actualidad, unas 80 mujeres se encuentran detenidas en las cárceles del régimen.
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