Los enfrentamientos entre combatientes de la Resistencia Palestina y las fuerzas de ocupación israelíes se intensificaron el lunes en la Cisjordania ocupada, cuando estas últimas llevaron a cabo una serie de incursiones y detenciones.
La resistencia respondió con un potente artefacto explosivo detonado en un vehículo militar en Qalqilya y feroces tiroteos en el campo de refugiados de Balata y el barrio de Al-Hesba. Estos enfrentamientos se producen en medio de la actual agresión israelí a la Franja de Gaza y han generado preocupación dentro de los círculos militares y de seguridad israelíes sobre un posible levantamiento en Cisjordania contra los colonos israelíes ilegales.
En Qalqilya, los combatientes de la Resistencia Palestina adoptaron una postura decisiva contra la incursión de las fuerzas de ocupación en la ciudad y el arresto de varios jóvenes. Respondiendo con la fuerza, la resistencia detonó con éxito un potente artefacto explosivo en un vehículo militar israelí, enviando un fuerte mensaje a los ocupantes.
Mientras tanto, en el campo de refugiados de Balata, al este de Nablus, los enfrentamientos se intensificaron cuando las fuerzas de ocupación encontraron intensos disparos de la Resistencia Palestina. El barrio de Al-Hesba también se convirtió en un campo de batalla entre las dos fuerzas, ya que los combatientes de la resistencia se opusieron ferozmente a la ocupación israelí.
Mientras la resistencia libraba una fuerte lucha en Qalqilya y Balata, las fuerzas de ocupación israelíes intensificaron su campaña en toda Cisjordania.
En Yata y Halhul, cerca de Al-Jalil, las fuerzas de ocupación llevaron a cabo redadas en residencias y en la Asociación de Caridad Islámica. Las fuerzas de ocupación israelíes se apoderaron de equipos y dispositivos, provocando más ira y resentimiento entre los palestinos locales.
La agresión israelí se cobró vidas inocentes. Un anciano palestino, Issa Al-Qadi, fue asesinado a tiros por soldados de ocupación israelíes en Al-Jalil, mientras que Muntasir Saif, de 34 años, sucumbió a las heridas sufridas por los disparos de las fuerzas de ocupación en la aldea de Burka.
Además de las detenciones realizadas durante las incursiones, las fuerzas de ocupación israelíes continuaron con sus tácticas agresivas asaltando varias ciudades, incluidas Beit Rima, Ariha, el campo de refugiados de Aqabat Yabr y varios barrios de la ciudad.
La exitosa repulsión por parte de la Resistencia Palestina de las incursiones de las fuerzas de ocupación israelíes en Cisjordania ha puesto de relieve su determinación y desafío contra la ocupación opresiva.
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