Para la Résistant Lambda, el giro que acaba de dar Rusia frente a Israel y cuyas manifestaciones se multiplican a un ritmo exponencial, manifestaciones que han ido desde la convocatoria del embajador israelí destinado en Tel Aviv hasta la denuncia rusa de los crímenes cometidos. durante 70 años contra Palestina, es obviamente una bendición siempre que se materialice en los hechos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia dijo el viernes pasado que Israel está tratando de explotar la situación en Ucrania para desviar la atención internacional del conflicto palestino. Esta nota de prensa se publica en respuesta a un ataque israelí contra Rusia, lanzado por el ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Yair Lapid, ataque al que hay que sumar la luz verde dada este miércoles a la venta de armas israelíes a kiev y ello en el contexto de la apoyo de la entidad sionista a la resolución de la Asamblea General de Naciones Unidas de suspender a Rusia como miembro del Consejo de Derechos Humanos de este organismo.
La declaración de la diplomacia rusa agregó que "el 'gobierno' israelí continúa la ocupación ilegal y la anexión de tierras palestinas, en violación de una serie de resoluciones del Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU. Es cierto que la reacción rusa contra Israel tuvo lugar en el contexto de un ataque israelí contra Moscú desde la tribuna de las Naciones Unidas. Pero la sensibilidad de la respuesta rusa proviene del hecho de que por primera vez este país toma una posición oficial contra Israel, que viola las resoluciones internacionales, y evoca claramente la anexión y la expansión de los asentamientos dentro de los territorios palestinos y el asedio de Gaza.
De hecho, hoy, cualquier observador imparcial puede concluir que Rusia está bajo una gran presión debido a su operación militar especial en curso en Ucrania, donde el presidente ruso, Vladimir Putin, siempre enfatiza que la operación lograría sus objetivos a través de la negociación o la guerra. Pero la otra parte, representada por Ucrania y la OTAN, que está ferozmente dirigida por Washington, también cree que impedirá que Moscú logre sus objetivos, y está trabajando con todas sus fuerzas y capacidades para drenar primero a Rusia en Ucrania, y segundo para forzar que termine su funcionamiento sin lograr sus objetivos.
Sin embargo, cualquier temor del luchador promedio de la Resistencia es ver a través de esta oposición de Moscú una simple maniobra política. Al fin y al cabo, los rusos deben añadir una maniobra adicional a su operación militar y estratégica basada, por qué no, en un ataque político contra Israel. Entonces, Rusia podría haber tomado tal posición, en primer lugar, sobre la base del ataque [diplomático] de Israel contra ella en las Naciones Unidas, y en segundo lugar, sobre la base de las repetidas agresiones contra los palestinos.
¿Es ese el caso? Por cierto, hay más de una señal que nos permite concluir que esta vez es la correcta y que los rusos no solo están jugando a la política:
1- El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia ha señalado explícitamente que Israel transgrede las leyes internacionales, viola las resoluciones de la ONU, desarrolla asentamientos, reprime a los palestinos y continúa con el bloqueo al pueblo palestino.
2- Moscú ha enviado un mensaje decisivo y sin precedentes a Israel, creyendo que a partir de ahora la posición rusa ya no será indulgente con Israel, que se burla de los derechos de los palestinos y árabes. Esta reacción estuvo ligada a la posición diplomática adoptada por Israel, que había mostrado su hostilidad hacia Moscú ante organismos internacionales.
3- Rusia puede incluso recurrir a medios para presionar a sus rivales en la guerra de Ucrania. Moscú está lista para implementar esta posición diplomática y política, primero desde Siria.
El antagonismo entre Israel y Rusia espera verlo suceder, ¿dónde exactamente?
1- Que Rusia debería centrarse más en proteger el espacio aéreo y terrestre sirio de los constantes ataques israelíes, y esto puede suceder mediante la activación de los sistemas de defensa aérea rusos en Siria.
2- Que se refuerce la cooperación y coordinación rusa con la parte iraní y el eje de la Resistencia en Siria, lo que sin duda duplicará el nivel de capacidades de los grupos de la Resistencia contra la entidad sionista.
Si se implementa este enfoque, Tel-Aviv estará bajo presión y no podrá soportar las consecuencias de esta posible decisión.
Moscú también considera que la seguridad de Israel es más importante para Washington que los acontecimientos en Ucrania, especialmente en un momento en que Israel se enfrenta a operaciones cada vez mayores de la Resistencia palestina.
Cualquier cambio de rumbo de Rusia hacia Israel pondrá en peligro la situación de la entidad sionista en el Medio Oriente y Tel Aviv ya no tendrá la oportunidad de sobresalir y amenazar a Rusia. ¿Pero Moscú llegará tan lejos?
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