Después de que los militares israelíes irrumpieron en Cisjordania, surgieron intensos enfrentamientos entre soldados y palestinos. Sorprendido por la resistencia de Cisjordania, el ejército israelí está huyendo de los enfrentamientos.
"El ejército israelí continúa sus abusos contra los palestinos en Cisjordania", escribió el sitio web de Al-Ahed.
"Como resultado de este asalto, intensos enfrentamientos entre los palestinos y los militares del régimen de Tel Aviv", informaron los medios de comunicación palestinos, solo 48 horas después de la operación particularmente exitosa de Salfit, donde dos israelíes, entre ellos Militares, fueron asesinados. El aparato de inteligencia israelí está en estado de shock por esta operación que está en línea con otras 4, todas realizadas en sinergia con las células de resistencia armada en Gaza.
Según testigos presenciales, los militares israelíes arrestan arbitrariamente a civiles, pero temen un choque armado en cualquier momento. La situación también es particularmente tensa en las cárceles, incluida la de Rimoun.
Algunas fuentes israelíes mencionan una acción "coordinada" entre la calle de Cisjordania y los combatientes encarcelados por el régimen israelí. Según el Centro Palestino para la Defensa de los Presos, después del asalto del ejército israelí contra los palestinos detenidos en la prisión de Rimoun, la situación en este centro penitenciario es cada vez más caótica. Unos 90 prisioneros palestinos han sido transferidos del Sector 7 al Sector 9 donde se instala un sistema de interferencia.
En protesta contra su traslado, los prisioneros palestinos se negaron a llevarse sus pertenencias con ellos. Advirtieron que pronto comenzarían las protestas.
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