El nuevo premier israelí, Naftali Bennett (dcha.), y Yair Lapid, en el parlamento de Israel, 13 de junio de 2021. (Foto: AFP)
El líder del derechista partido Yamina, Naftali Bennett, jura como primer ministro del régimen israelí, lo que pone fin a 12 años de liderazgo de Netanyahu.
Despúes de dos años de parálisis política, Bennett logró el domingo el visto bueno de 60 de los 119 parlamentarios israelíes presentes y así obtuvo la confianza del legislativo para liderar el gabinete en los dos próximos años.
Según el acuerdo de coalición que cerró con el centrista Yair Lapid, Bennett ocupará el cargo hasta septiembre de 2023, cuando entregará el cargo a Lapid —jefe del partido Yesh Atid—, quien gobernará por otros dos años.
La frágil coalición está integrada por partidos que van desde la izquierda a la derecha, que se unieron con el único objetivo de sacar del poder a Bejamín Netanyahu.
Netanyahu promete liderar la oposición para volver a poder
En un discurso ofrecido antes de la votación, el ahora ex primer ministro israelí, que sumó todos sus esfuerzos para quedarse en el poder, dijo que bajo su liderazgo “la oposición israelí tendrá una voz fuerte y clara”.
“Si es nuestro destino estar en la oposición, lo haremos con la cabeza en alto hasta que derribemos a este mal gobierno y volvamos a liderar [...] nuestro camino [...] ¡Volveremos pronto!”, anunció Netanyahu, del partido Likud, en declaraciones a la agencia francesa de noticias AFP.
Reacción de EEUU, amigo y aliado de Israel
El presidente estadounidense, Joe Biden, en un comunicado, felicitó a Bennett y su gabinete, y expresó su disposición a fortalecer las cooperaciones con el régimen de ocupación de Tel Aviv.
“Espero trabajar con el primer ministro Bennett para fortalecer todos los aspectos de la relación cercana y duradera [...] Israel no tiene mejor amigo que Estados Unidos”, sostuvo Biden.
La reacción de Washington no se limitó al citado texto; Biden y Bennett mantuvieron una llamada telefónica para abordar la nueva era en las relaciones EE.UU.-Israel.
En su conversación, Biden aseguró a Bennett que Washington seguirá estar comprometido con la seguridad del régimen usurpador de Tel Aviv.
Ambas partes acordaron que ellos y sus equipos consulten de cerca sobre todos los asuntos, incluyendo los desafíos y las oportunidades.
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