Hace seis días, información ampliamente compartida por fuentes israelíes mostró que muchos soldados israelíes se niegan a hacer su servicio militar cerca de la Franja de Gaza. Una negativa justificada en gran medida después del doble fiasco de los comandos israelíes en Jan Yunis. De hecho, después de la derrota esta la operación de infiltración en el mes de noviembre, que terminó con una campaña de ataques con cohetes y misiles de 48 horas contra las colonias del sur de los territorios ocupados, “Israel” se horrorizó al enterarse de una reciente operación espectacular de un combatiente palestino vestido como un soldado en la frontera de Gaza.
Todas las autoridades de Ramalá han pedido que los palestinos de la Cisjordania y el Al Quds ocupados se levanten y hagan lo que esté en su poder para poner fin a una ocupación israelí que exige ahora la liquidación total de Palestina. El jueves, un soldado israelí fue encontrado muerto a la entrada del asentamiento Migdal Oz, en el sur de Cisjordania, en la región de Gush Etzion. Es una zona situada no muy lejos de Al Jalil (Hebrón). Incluso los funcionarios de “seguridad” israelíes, generalmente demasiado orgullosos para reconocer sus debilidades, describieron el ataque como extremadamente “inusual” y “grave”. Y la serie de sorpresas no ha terminado, dicen los observadores.
El cuerpo del soldado fue encontrado el jueves por la mañana cerca del asentamiento de Migdal Oz, en Gush Etzion, en el sur de Cisjordania, luego de que su familia anunciara su desaparición. Las fuerzas israelíes, obviamente desconcertadas, no rechazan la hipótesis de un “secuestro” seguido de “una ejecución”, sin obviamente poder aplacar el pánico que acaba de apoderarse de los colonos. Porque la muerte del soldado israelí tuvo que seguir a una operación de infiltración bien planificada que tuvo lugar en las mejores condiciones, ya que las fuerzas israelíes solo fueron informadas hasta bastante después de la desaparición del soldado. Que el militar israelí fuera muerto con arma blanca no cambia la naturaleza de este nuevo fiasco, ya que la próxima vez que los perpetradores lleven a cabo este tipo de operaciones podrían usar armas de fuego. El Gush Etzion está compuesto por 22 asentamientos con una población de 70.000 habitantes y está plantado ilegalmente en el corazón de Cisjordania.
Las unidades del ejército sionista, Shin Bet y la Policía israelí han iniciado un registro a gran escala en el área sin que esto haga que los colonos se sientan seguros.
Para el régimen israelí, este “incidente” marca una “catástrofe de seguridad” en la medida en que la situación empeora cada vez más en Cisjordania, donde los llamamientos a la lucha armada se suceden.
El Shin Bet dice que los autores del asesinato probablemente querían secuestrarlo “y usarlo como moneda de cambio para asegurar la liberación de los prisioneros palestinos”. Según la prensa israelí, este tipo de explicación solo reaviva el temor de los colonos que esperan ahora ser el objetivo de secuestros. Otros elementos de la investigación preliminar de Shin Bet son aún más interesantes: “El soldado asesinado habría dado una última señal de vida a las 19:30 (hora local) y su desaparición se informó a las 23:50 de la tarde del miércoles 7 de agosto antes su cuerpo fuera hallado a las 3:13 de la mañana del 8 de julio. En otras palabras, los atacantes actuaron muy rápido, lo que sugiere que eran profesionales”.
http://spanish.almanar.com.lb/342124
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